Catorce palabras para admitir algo obvio hasta para un lactante, y mil ciento ochenta para volvernos a contar que son los paladines del pueblo dedicados de por vida a servirlo, peleando contra estados opresores que solo usan de la tortura y la extrema violencia para aplastar las aspiraciones de libertad de un pueblo que solo existe en la imaginación de sus creyentes.
Y dirán que es un gran avance porque ahora eligen esta estrategia política y no la de las armas, ahora toca utilizar las leyes del sistema que no reconocen para salirse con la suya. Y . hacer un llamamiento a la ciudadanía, instituciones, agentes sociales y partidos políticos para buscar un amplio consenso que posibilite su regreso a casa, enmarcado en un proceso integral, que no ponga en cuestión su carácter ni dignidad política.
Comunicado de "arrepentimento";
El Foro Social de Euskal Herria, ante el bloqueo del proceso de
resolución el pasado mes de marzo hizo varias recomendaciones. Algunas afectan
directamente a nuestro colectivo.
Si bien es cierto que dichas recomendaciones no son fruto del
proceso de reflexión y dinámica del colectivo, entendemos que deben ser tomadas
en consideración en la medida en que integran elementos para la resolución y
habida cuenta del apoyo social y político obtenido.
Por todo ello, dichas recomendaciones han sido objeto del debate
llevado a cabo por nuestro colectivo estos últimos meses.
Queremos llamar la atención sobre las difíciles condiciones y el
acoso del que ha sido objeto nuestro colectivo a la hora de llevar a cabo dicho
debate. Aunque la represión carcelaria es siempre extrema, muy lejos de lo que
cabía esperar, tras la decisión de la organización ETA de poner fin a la lucha
armada hace ahora dos años, no se ha flexibilizado, e incluso, en algunos
casos, hasta se ha acentuado. A día de hoy, los nuevos tiempos no han llegado
hasta aquí. Somos rehenes de los Estados español y francés y a través de sus
funcionarios sufrimos a diario el acoso del sistema carcelario construido para
aniquilarnos tanto a nosotros como a nuestros familiares y amigos.
Se sirven de leyes y medidas de excepción para negar los
derechos y beneficios penitenciarios que nos corresponden, a fin de
obstaculizar la excarcelación hasta imposibilitarla. Así es como han llenado
las cárceles. Para las y los presos vascos, dispersión equivale a deportación,
que más que al propio preso, acarrea un sufrimiento añadido a sus allegados.
En toda esta maquinaria, la tortura constituye un elemento
esencial, que exige que la política penitenciaria y los procedimientos
judiciales sean revisados y evaluados y reparado el daño causado.
Siguen utilizando la política penitenciaria al servicio de
objetivos e intereses políticos, vulnerando y violando derechos fundamentales,
tal y como ha sentenciado Europa, antes alimentando la confrontación, ahora
obstaculizando la solución.
Los enemigos de la libertad de Euskal Herria, que hoy son
enemigos de la paz, pretenden ahogar entre los muros de la prisión el proceso
democrático que la ciudadanía vasca, con la participación de todas y todos,
trata de llevar hasta el final.
Siendo conscientes de su intención y para evitar que el proceso
de solución se enfangue, el EPPK asume la responsabilidad que le corresponde.
Puesto que lo que nos trajo a prisión fue la lucha por la
libertad política y social de nuestro pueblo, desde la cárcel seguimos
luchando. Y aun cuando para algunos de nosotros han transcurrido ya muchísimos
años desde que respiramos fuera de estos muros la libertad por última vez,
seguimos comprometidos con el futuro de nuestro pueblo, exactamente igual que
el primer día en que nos implicamos en la lucha.
En este sentido, desde la humildad, continuamos firmemente
decididos a seguir aportando y situamos en esa línea nuestra reflexión e
iniciativa.
El EPPK con el objeto de responder a las recomendaciones del
Foro Social ha finalizado su reflexión adoptando una posición.
Por ello, a través de la siguiente declaración, nos dirigimos a
la ciudadanía vasca, a sus distintos agentes y a cuantos en el ámbito internacional,
individual o colectivamente han mostrado responsabilidad para la solución del
conflicto:
1. A nuestro modo de ver, para resolver las consecuencias del
conflicto político resulta indispensable tomar en cuenta el origen y las
razones del mismo. Es precisa una hoja de ruta firme para que el conflicto que
sufre nuestro pueblo encuentre una solución integral. El origen político del
conflicto exige asimismo una solución política.
2. La normalización política se debe basar en la posibilidad de
desarrollar y llevar a cabo democráticamente todos los proyectos políticos.
Debemos evitar cualquier salida parcial o falsa para impedir que el conflicto
se perpetúe y no defraudar ni al pueblo ni a su ciudadanía.
3. La solución política ha de ser integral y es imprescindible
que en el ámbito de las consecuencias del conflicto exista una visión global
que tome en cuenta y desarrolle todos sus apartados. Reconocemos con toda
sinceridad el sufrimiento y daño multilateral generado como consecuencia del
conflicto.
4. Reconocemos el nuevo escenario surgido tras el cese de la
lucha armada de ETA y en adelante, en pro de la libertad de Euskal Herria,
utilizaremos vías y métodos políticos y democráticos, de acuerdo con las
decisiones que se han tomado en ese sentido.
Por ello, en lo sucesivo renunciaremos al empleo del método
utilizado en el pasado para hacer frente a la imposición, represión y
vulneración de derechos. Nuestro compromiso con el nuevo escenario es nuestra
decisión de fortalecerlo y consolidarlo.
5. Es necesario derogar toda situación y medida de excepción.
Adaptar el entramado jurídico a la situación política. Cambiar radicalmente la
política penitenciaria y priorizar el fin de la dispersión. Reconocer nuestros
derechos, posibilitar nuestra vuelta a casa e impulsar la solución integral a
la actual situación política.
6. Por todo ello, podríamos aceptar que nuestro proceso de
vuelta a casa –nuestra excarcelación y de manera prioritaria nuestro traslado a
Euskal Herria- se efectuasen utilizando cauces legales, aun cuando ello, para
nosotros, implícitamente conlleve la aceptación de nuestra condena. Compartimos
que tanto la ley como su aplicación cumple una función esencial de cara al
futuro, ya que han de ser utilizadas para fortalecer los pasos que hayan de
darse.
7. Estamos dispuestos, dentro de un plan de actuación global, a
estudiar y tratar la posibilidad de que el proceso que culmine con nuestra
vuelta a casa se efectúe de manera escalonada, mediante compromisos
individuales y en tiempo prudencial.
8. Asumimos toda nuestra responsabilidad sobre las consecuencias
derivadas de nuestra actividad política en el conflicto político. Asimismo,
mostramos nuestra voluntad para analizar la responsabilidad de cada uno de
nosotros, dentro de un proceso acordado que reúna las condiciones y garantías
suficientes.
Para ello:
1. El EPPK se pondrá en contacto con los promotores de las
recomendaciones del Foro Social y con otros agentes de Euskal Herria, a fin de
buscar acuerdos en torno a los mismos y de encontrar fórmulas que permitan su
desarrollo.
2. A fin de facilitar la superación de las situaciones de
excepción que sufrimos en las cárceles, el EPPK escuchará las propuestas y
reflexiones de los distintos agentes y compartirá las suyas, con objeto de que
las decisiones y pasos que se adopten para que el proceso avance sean
compartidos y gocen del apoyo necesario.
3. Hacemos un llamamiento a la ciudadanía, instituciones,
agentes sociales y partidos políticos para buscar un amplio consenso que
posibilite nuestro regreso a casa, enmarcado en un proceso integral, que no
ponga en cuestión nuestro carácter ni dignidad política.
4. No es tiempo de ocultarse tras dificultades e impedimentos.
Es hora de la responsabilidad política. La de todos. También [Ndu1] la nuestra, en la medida en que somos parte
y consecuencia del conflicto político. El EPPK no rehuirá sus propias
responsabilidades ni dependerá de los movimientos de los demás para hacer los
suyos ya que mostramos nuestro absoluto compromiso en ser un agente activo y
eficaz tanto en el conflicto como en su solución. Haremos cuanto esté en
nuestra mano, con total generosidad, en la consecución de la libertad de Euskal
Herria.